Lo normal en este caso es que sí que exista una fuga de agua, pero deberíamos comprobar, inicialmente, que el consumo de agua no se deba a algún elemento de la propia instalación.
Los elementos susceptibles de generar consumos de agua más comunes son:
- Inodoros. Es muy probable que fallen los mecanismos de llenado y evacuación del tanque y se genere un gasto continuo de agua.
- Depósitos de agua. Están presentes en muchas comunidades de vecinos y en algunas viviendas particulares. Disponen de una válvula de llenado mediante flotador y los fallos son también comunes en estos sistemas, pudiendo generar un gran gasto de agua si no se solucionan rápidamente.
- Llenados automáticos. Son menos comunes en viviendas pero están presentes en algunas calefacciones de grandes superficies, como en comunidades, centros comerciales o centros educativos y, también, se pueden encontrar en algunas piscinas. En caso de fuga en estas instalaciones, el llenado automático aportaría agua de manera continuada generando un elevado consumo.
- Electro-válvulas de riego. En caso de disponer de riego automático, es posible que un defecto en el cierre de las electro-válvulas nos genere un consumo de agua importante. Normalmente, estos fallos son visibles al salir agua continuamente por alguno de los aspersores.
Una vez verificada nuestra instalación, si el contador de agua registra un consumo constante, consulte con un especialista en detección de fugas de agua.